Donald Trump será sentenciado el próximo viernes 10 de enero, solo diez días antes de su toma de posesión para su segundo mandato presidencial.
El juez Juan M. Merchan ha fijado el 10 de enero como la fecha para sentenciar al presidente electo Donald Trump en el caso relacionado con pagos realizados para ocultar información desfavorable durante su primera campaña presidencial en 2016. Esta decisión llega poco más de una semana antes de que Trump asuma nuevamente la presidencia el 20 de enero.
Merchan determinó que Trump no enfrentará tiempo en prisión, sino un descargo incondicional, cerrando el caso sin sanción adicional. El presidente electo podrá comparecer de forma virtual si así lo desea.
En un fallo de 18 páginas, el juez explicó que buscó equilibrar diversos factores:
• La capacidad de Trump para gobernar sin interrupciones.
• La expectativa pública de igualdad ante la ley.
• La importancia de preservar el veredicto del jurado.
“No se encontró impedimento legal para proceder con la sentencia antes de su toma de posesión”, afirmó Merchan.
Contexto del caso
En mayo, Trump fue declarado culpable de 34 cargos de falsificación de registros comerciales. Estos involucraban el pago a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels para evitar la publicación de afirmaciones sobre una relación personal con Trump, lo cual él niega categóricamente.
El pago, realizado por su entonces abogado Michael Cohen, fue registrado como “gastos jurídicos” en los libros de la empresa de Trump. Según los fiscales, esta maniobra buscaba ocultar la naturaleza del gasto y proteger la imagen del candidato en vísperas de las elecciones de 2016.
Rechazo de la solicitud para desestimar el caso
Merchan rechazó las solicitudes de Trump para desestimar el caso alegando inmunidad presidencial. En su fallo, destacó que el estatus de presidente electo no otorga la misma inmunidad que un presidente en funciones. Además, calificó como “drástica” la idea de anular el veredicto del jurado.
Implicaciones legales y políticas
Este caso marca un precedente histórico, ya que Trump se convierte en el primer expresidente declarado culpable de un delito y el primer presidente electo en enfrentarse a un juicio penal.
Aunque los fiscales propusieron alternativas, como suspender el caso durante el mandato presidencial, Merchan optó por sentenciarlo antes de la toma de posesión.
Este proceso es el único de los cuatro casos penales contra Trump que ha llegado a juicio. Los demás casos, incluidos los relacionados con los intentos de revertir las elecciones de 2020 y el manejo de documentos secretos, han sido suspendidos o desestimados.
El presidente electo ha calificado el veredicto como parte de una “cacería de brujas” y mantiene su posición de inocencia, asegurando que las acusaciones buscan dañar su imagen y su regreso al cargo.