El acosador es aficionado a la saga Star Wars y a los juegos de mesa, además de contar con una Maestría en Computación
Una joven denunció públicamente en redes sociales un incidente de acoso en la Feria de Puebla, donde un hombre se le acercó de manera inapropiada y colocó su pie izquierdo entre sus piernas mientras ella llevaba un vestido. La situación se intensificó cuando el sujeto, identificado como Miguel Felipe Pérez Escaleras, intentó huir del lugar. Fue capturado por las autoridades luego de ser grabado y seguido hasta una de las salidas del recinto.
Miguel Felipe Pérez Escaleras, de 40 años, es originario de Oaxaca y trabajaba como docente en el área de artes plásticas en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Tras su detención, fue llevado a un módulo de juzgado cívico y posteriormente a las oficinas de la policía estatal para declarar sobre los hechos. Según el testimonio de la víctima, el trato inicial por parte de las autoridades fue adecuado, pero el proceso en el Ministerio Público resultó poco amable y desgastante, llegando a sugerirle a la víctima que podría resolver el asunto mediante un acuerdo económico, propuesta que fue rechazada por la joven.
De acuerdo con información adicional, Pérez Escaleras también participa en grupos de la plataforma Telegram que comparten videos y contenido íntimo sin el consentimiento de las mujeres. La policía estatal confirmó que fue detenido luego de que la víctima lo sorprendiera grabando con una cámara oculta en su calzado.
Por su parte, la BUAP emitió un comunicado informando que Miguel Felipe Pérez Escaleras fue dado de baja de su plantilla docente, y su área jurídica está revisando el caso. El comunicado, publicado en la cuenta de la red social X de la Escuela de Artes Plásticas y Audiovisuales, expresó que la universidad “no tolerará conductas indebidas que lesionan la vida social y la privacidad de las personas”. La institución subrayó que el caso está siendo atendido por la Oficina de la Abogada General y se le dará seguimiento jurídico.
El caso ha generado una fuerte reacción en redes sociales, con un amplio apoyo y solidaridad hacia la víctima y un repudio generalizado hacia el agresor y la respuesta del Ministerio Público. Se han solicitado acciones legales firmes y una mayor visibilidad del caso para garantizar que se haga justicia. La comunidad espera que este incidente lleve a un examen más detenido sobre el tratamiento de casos de acoso y violencia de género, tanto en el ámbito educativo como en la sociedad en general.