Las víctimas realizaban zanjas para evitar que carros con madera ilegal salgan de su ejido forestal cuando fueron atacados
En la madrugada del domingo, presuntos talamontes perpetraron un ataque directo contra guardabosques ejidatarios en la zona Izta-Popo, resultando en tres personas fallecidas y un herido. José Ángel Pelcastre, Ventura Ojeda y Florentino Castro perdieron la vida, mientras un cuarto individuo fue trasladado a un hospital con heridas de arma de fuego.
Los pobladores de San Andrés Hueyacatitla, en San Salvador El Verde, informaron que el grupo trabajaba en las faldas del Iztaccíhuatl, utilizando un trascabo para cuidar el bosque. Tras el suceso, la comunidad tocó las campanas de la iglesia y las autoridades locales, estatales y federales intervinieron.
Después de negociaciones, la Fiscalía General del Estado realizó las investigaciones pertinentes y el levantamiento de los cuerpos. La Secretaría de Seguridad Pública de Puebla confirmó el ataque, indicando que los agresores podrían estar relacionados con la tala clandestina.
La dependencia estatal desplegó un operativo para localizar a los responsables y reafirmó su compromiso en la lucha contra delitos forestales. San Andrés Hueyacatitla, con una organización ejidal para proteger el bosque, ha solicitado repetidamente apoyo federal para reforzar la vigilancia ante actividades de talamontes.
La comunidad, conocida por el Santuario de las Luciérnagas, busca la conservación del área natural y reporta constantemente actividades ilegales. La Secretaría de Seguridad Pública reafirma su apoyo en las investigaciones y refuerza el compromiso conjunto para combatir delitos forestales.
