La Asociación Poblana de Hoteles y Moteles solicitará al Congreso del estado que la recaudación del Impuesto Sobre Hospedaje se redireccione para la promoción turística y no para seguridad.
La Asociación Poblana de Hoteles y Moteles anunció que solicitará al Congreso del Estado que la recaudación del 3% correspondiente al Impuesto Sobre Hospedaje (ISH), que genera entre 80 y 100 millones de pesos anuales, sea redireccionada nuevamente a la promoción turística, y no a seguridad pública como ocurre actualmente.
Manuel Domínguez Gabián, presidente del organismo, informó en entrevista con El Economista que la próxima semana sostendrán una reunión con la presidenta del Poder Legislativo, Laura Artemisa García Chávez, para presentar formalmente la propuesta.
Domínguez Gabián recordó que durante la administración del exgobernador Miguel Barbosa Huerta se determinó —con aval del Congreso— que los recursos del ISH fueran destinados a seguridad. No obstante, consideró urgente revertir esta medida ante la baja ocupación hotelera que enfrenta el sector, actualmente del 52%, cuando en años anteriores promediaba el 60%. Además, la estadía promedio bajó de 2 a 1.5 días.
“Son cifras que reflejan un panorama complicado para el sector, el cual no cuenta con recursos para invertir en su propia promoción debido a la desaceleración económica que atravesamos”, señaló.
El dirigente enfatizó que la solicitud al Congreso también requerirá que el Ejecutivo estatal envíe una iniciativa para modificar las Leyes de Egresos e Ingresos, a fin de que el uso del ISH vuelva a enfocarse en la actividad turística.
Como ejemplo de la situación actual, mencionó la reciente Universiada, evento que reunió a 6,000 participantes. Aunque representó una derrama moderada, se ocuparon únicamente 60 habitaciones por noche debido a que los visitantes se alojaron en habitaciones cuádruples, mayoritariamente en hoteles fuera del Centro Histórico.
Finalmente, Domínguez Gabián señaló que si bien este tipo de eventos son positivos, sería deseable que su beneficio se extienda también a hoteles de categorías más bajas, y no se concentre solo en los de cuatro y cinco estrellas.