El presidente Trump informó que los aranceles sobre los autos podrían llegar alrededor del 2 de abril.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes desde la Oficina Oval que su administración impondrá nuevos aranceles a los automóviles importados, los cuales podrían entrar en vigor alrededor del 2 de abril.
Estos aranceles forman parte de una estrategia comercial más amplia que el mandatario ha denominado “arancelitis”, con la cual busca reorganizar las relaciones comerciales de Estados Unidos. La aplicación de aranceles de hasta el 25% afectará directamente a la industria automotriz mexicana, impactando los costos de armadoras como General Motors, Ford, Nissan, Stellantis, Honda y Toyota, además de desacelerar las exportaciones del sector.
Actualmente, Estados Unidos es el principal socio comercial de México y el mayor comprador de vehículos fabricados en el país, especialmente SUVs y camionetas, debido a la alta demanda del mercado estadounidense y la limitada capacidad productiva de su industria automotriz.
Aranceles recíprocos y nuevas amenazas comerciales
A principios de esta semana, Trump también anunció aranceles recíprocos contra países que imponen impuestos a las importaciones de productos estadounidenses. Estos gravámenes podrían implementarse tan pronto como en abril.
El presidente ha amenazado con extender estas medidas a otros sectores estratégicos como la energía, los semiconductores y los productos farmacéuticos. Asimismo, ha utilizado los aranceles como una herramienta de presión política en temas como la migración y el combate al tráfico de drogas ilegales.
Durante su campaña electoral, Trump prometió incentivar a las empresas automotrices extranjeras, particularmente las alemanas, para que trasladen su producción a Estados Unidos, aunque los expertos consideran que este objetivo es poco viable debido a las barreras comerciales existentes.
Por otro lado, el mandatario ha decidido postergar la aplicación de aranceles a todas las importaciones provenientes de México y Canadá hasta marzo, mientras continúan las negociaciones sobre seguridad fronteriza.